Finalmente, nos encontramos por Skype con Anónimo, que está en la sucursal Curitiba de Construx.
En medio de la charla, accidental o incidentalmente, me enumeró los seis mandamientos que emanan de las fuentes vaticanas del antiguo arte de defalcar empresas:
1) Tener un contador amigo
2) Tener un abogado amigo
3) Tener un/os boludo/s que firme/n
4) Tener a los hijos de puta distraídos y/o agarrados de los huevos
5) Crear una sociedad X y tener influencia en una sociedad preexistente Z
6) Hacer que Z subcontrate a X
La etapa más difícil consiste en los puntos 3 y 4; pero no hay mal que por bien no venga… y, en esto, tenemos que agradecerle al Gordo y a Anónimo.
(Aplausos, por favor, se abre el telón)
***
Estaba el Cholo tranqui en su despacho, como siempre, mirando nenas amateur bailando reggaeton en YouTube.
Le suena el teléfono, dice “aló”, escucha atento y se sobresalta un poco.
“¿Pero no había militares cubriendo la zona? ¿Alguno está muerto? No… ¿De veras? Por Dios.”
Pobre, no sabe que hacer. No puede creer tamaño quilombo.
Se entretiene un poco para calmar los nervios. Mira la hora. Pasan dos horas y sigue paralizado. Agarra el celular y revisa la agenda telefónica. Mira una planilla, duda un poco, aprueba los viáticos del Ucraniano y Murdock. Sigue firmando cosas, facturas de proveedores y órdenes de servicio que le dejó Murdock más un poder que le habíamos dejado hace una hora.
El cholo no sabe manejar tanto pánico. Cuando lo acorrala el temor, bebe; y cuando bebe, se descontrola; y cuando se descontrola, hace cagadas; y cuando hace cagadas, somos testigos.
Ja ja ja ja ja ja. ¿Y el relajo, Cholo? Ja ja ja ja ja ja.
¿Preocupado?
Ja ja ja ja ja ja.
¿Q’ hachemo ‘hora Cholito?
***
Estaba Abel perturbadito en su despacho, como siempre, viendo cómo dibujar los reportes de gestión.
Le suena el teléfono, dice “holá”, escucha atento y se sobresalta un poco.
“¿Pero no habían arreglado con Petrobrás el tema de las penalidades? ¿50 palos? No… ¿En serio? Por Dios.”
Pobre, no sabe que hacer. No puede creer tamaño quilombo.
Se entretiene un poco para calmar los nervios. Mira la hora. Pasan dos horas y sigue paralizado. Agarra el celular y revisa la agenda telefónica. Mira una planilla, duda un poco, aprueba los viáticos del Turco y Anónimo. Sigue firmando cosas, actas acuerdo y un poder que le había enviado Anónimo hace cinco horas.
Abel no sabe manejar el pánico. Cuando lo acorrala el temor, se descompone; y cuando se descompone, no puede viajar; y cuando no puede viajar, no puede controlar; y cuando no puede controlar, los dueños de Construx no se enteran de nada.
Ja ja ja ja ja ja. ¿Y tu poronga, Abel? Ja ja ja ja ja ja.
¿Impotente?
Ja ja ja ja ja ja.
¿Q’ hachemo ‘hora Abelito?
***
Entre el Vaticano y Calabria… Anónimo.
10 comentarios:
Punto 3: los mano de piedra son todo un mundo aparte. (en el caso de los que lo hacen premeditadamente)
Lo gracioso pero agitado es cuando deciden cagarse entre los socios directores de una PYME. Comienzan a aparecer proveedores parasitarios digitados de arriba, que cobran sospechosamente precios siderales por trabajos y/o servicios que valen la mitad... Y en el medio, vale todo, el gasto ya no se controla y los rumores que agitan continuamente, ya que para esta altura llega un punto en que todos quieren una porción del chancho, que agoniza, entre estertores y saqueos obscenos.
Luego de plantear varios escenarios con Anónimo; realmente la solución óptima es subcontratar fantasmas.
Efectivamente, las situaciones de chanchullos en Pymes son deliciosas. Una mezcla de Fuenteovejuna, El Padrino III y Los bañeros más locos del mundo.
dejo mi ultimo comentario via Blacburbury, ya que como escuchan de fondo, sale mi vuelo para Caiman en 5..4...3..2.. chau. Nos vemos en el epilogo.
Anonimo
Gracias por toda la magia.
Cuando podamos liberar la platita, nos enfiestamos con la locutora del Aeropuerto de Río de Janeiro.
"Estaba el Cholo tranqui en su despacho, como siempre, mirando nenas amateur bailando reggaeton en YouTube." - Gran caracterización del Cholo.
Me cagué de risa. Yo tenía un jefe que decía ser religioso porque acudía a misa semanalamente. Decía tener una iglesia en Brasil cuando iba y también tenía una en capital y una en Córdoba cuando viajaba para allá. El Cholo me hace acordar a cuando el gordo se metía en las páginas de escorts y me mostraba para que opinara sobre cual de ellas tenía las mejores prestaciones. Esto generalmente ocurría cerrando un "budget" con la cabeza quemada y a las ocho de la noche. Uno seguía enchufado dibujando números, y él mirando videos porno y páginas de putas. Yo volvía a casa hecho mierda y él se iba de putas.
Das ist der Chölen.
"Budget"... Dios mío... Laburé dos años en planeamiento financiero y entiendo perfectamente a qué te referís.
(Llegó el Cholo, tengo que cortar)
Y laburé tres meses en Brasil en la empresa de unos fanáticos religiosos y sé también a lo que te referís.
Este jefe, a quien le decíamos el gordo, le decía "iglesia" a los cabarulos. Cuando decía que iba a la iglesia era porque se iba a un cabaret. Tenía uno en SP, otro en BA y otro en CBA y cada vez que llegaba lo recibían con su nombre.
Aaaaaaah, no... flashé con otra cosa, relacionada a mi experiencia cercana con el evangelismo brasilero.
Estos sinvergüenzas ponían cartelitos con pasajes de la Biblia en toda la fábrica y después te recontra garcaban en los contratos.
evangelismo brasilero = reunión de herbalife
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