Capítulo 18 – Decisiones Políticas

¿Por qué la gente no dice las cosas en el momento oportuno?

Si Abel (en carácter de representante de Construx durante la licitación del gasoducto) intuía los problemitas de adicción del representante de la empresa con la cual se asociaría (el cocainómano impresentable: alias Mr. Coke, alias El Merquero, alias Nguyen van Troi, alias Cléverson Barreda Cheng) para llevar a cabo el proyecto… ¿Por qué no le consultó sobre las capacidades concretas de Machiaven para cumplir su parte del trato?

¿No le dio curiosidad conocer la forma mediante la cual un cocainómano rodeado de Zombies y entongado con subcontratistas fantasmas ejecutaría en tiempo y forma la construcción del gasoducto?

¿Le faltaron huevos, sabe algo (y nosotros no) o ni se le ocurrió?

Si el Cholo (en carácter de representante de Construx Sucursal Colombia durante la construcción del gasoducto) intuía los problemitas de liderazgo del Director de Proyecto que puso Machiaven… ¿Por qué no le preguntó en profundidad sobre cómo planeaba encarar semejante proyecto?

¿No le dio curiosidad conocer la forma mediante la cual un viejecillo senil que nunca dirigió un proyecto tal y no sabe tratar a los jefes de obra ejecutaría en tiempo y forma la construcción del gasoducto?

¿Le faltaron huevos, sabe algo (y nosotros no) o ni se le ocurrió?

Si Abel (en carácter de controller de Colombia) intuía que el Cholo no se metía de lleno en el tema, a pesar de las advertencias del Turco… ¿Por qué no le bajó línea cuando debía hacerlo?

Sea cual sea la causa de sus omisiones: inutilidad, desidia o malicia; el efecto es uno sólo: la obra va para el orto.